Los amantes de las plantas raras siempre estamos probando, buscando y cultivando ejemplares de algunas especies singulares y de vez en cuando, te sorprenden. Este es el caso de la Alpinia Zerumbet Variegata. Se trata de una planta rizomatosa que cultivada debidamente crece a gran velocidad. En este artículo vamos a contarte cómo hemos hecho nosotros para conseguir cultivarla en nuestro jardín exterior todo el año, al calor del verano y el frío del invierno.
La Alpinia es originaria de la Polinesia, y se ha extendido por todo el mundo debido a su flor tan bella y su facilidad de cultivo. Es una planta tropical que adora la humedad y la sombra parcial, aunque puede vivir a pleno sol. Transplantando en Febrero una maceta de 12 (diámetro de la maceta en cm) con una planta de 50 cm aproximadamente de altura y seis tallos a suelo libre, en el mes de Diciembre está multiplicada su tamaño, envergadura y altura considerablemente. También se habrá reproducido de forma exponencial, pasando de 6 tallos a más de 20. Si así se quiere, al final del otoño podremos sacar algún rizoma de los nuevos si deseamos reproducir la planta. Ten en cuenta que deberás de cavar hondo para obtener los hijuelos sin dañar las raíces, pues parten desde profundidad.
En cuanto a sus cuidados, solo requiere buena iluminación en sombra o semisombra y un buen riego; agradece que este sea por inundación para que pueda penetrar bien el agua hasta las raíces más profundas.
Te animamos a cultivar esta planta en tu jardín, y para las noches más frías del invierno, heladas o nieve, ¡puedes protegerla para conservarla en buen estado! Puedes aprender a proteger tus plantas del invierno AQUÍ.
¡Alpinia Zerumbet, acierto seguro!